Una de mis danzas favoritas.
La historia de Sigfrido y Odette una hermosa doncella que fue convertida en cisne junto a sus compañeras por el malvado mago Rothbart. Solo por las noches ellas volvían a ser humanas y este conjuro daría por terminado a quien le jurase amor eterno...
El placer de ver el ballet y escuchar a Tchaicovsky permite que me sumerja en historias y personajes que recobran vida en cada acorde. La exquisita sensiblidad del compositor nutre de paz y esplendor al alma.
Una vez dije: "No quiero un mundo sin Romeos ni Julietas
que no juren amarse, porque si ello sucediese
se perderían los sueños y se extinguiría el amor"
Indiana
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